🏳️⚧️MI FANTASÍA TRANS HECHA REALIDAD🏳️⚧️
Anónimo Trans
🏳️⚧️MI FANTASÍA TRANS HECHA REALIDAD🏳️⚧️
UN RELATO ESCRITO POR ANONIMO
Hola, siempre que llego a mi casa después de trabajar me transformo en mujer, inmediatamente me visto con mis ropas femeninas y calzo mis zapatillas o sandalias, y así permanezco durante un buen rato en mi cuarto. Vestido y actuando como mujer, mi sueño dorado es atreverme a salir a la calle vestida así, pero, bueno, no me atrevo a hacerlo.
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En una ocasión, ya entrada la noche (aproximadamente las 11) estando yo vestida con una minifalda de cuadritos, blusa color de blanca sin mangas y sandalias de tacón de 5 cm recordé que tenía que ir como a cien pasos de mi puerta a dejar la basura, me asomé a la calle y la vi desierta, por un momento estuve indecisa a salir o no, asi como estaba, pero al final tomé la decisión de hacerlo,cogí las bolsas de basura y salí a la calle.
El corazon me latia fuertemente y la boca la sentía seca, caminé despacio hasta llegar a la esquina y allí mire a todos lados sin ver a nadie en la calle, por lo que con más confianza caminé hacia el lugar donde todos los vecinos dejamos la basura y donde el camión la recoge.
Camine primero con prisa y después con más aplomo hasta que llegue al lugar indicado, en medio de una avenida de dos carriles, deje la basura y regrese ya con más seguridad. Al llegar a la esquina de mi calle doble y oh¡ sorpresa, me encontré con un vecino joven de más o menos 30 años hablando por teléfono, pase a su lado y este con voz sensual me saludó.
- Buenas noches vecino- me dijo, respondí a su saludo y seguí mi camino a mi casa.
Después de dos horas, ya acostada y dormida con mi batita oí que tocaban a mi puerta, corrí la cortina de la puerta que da a la calle y para sorpresa mía allí estaba mi vecino, quien muy formal volvió a darme las buenas noches y me pidió un vaso de agua, quite el candado de la puerta y lo invite a pasar.
Él muy tranquilo, se sentó en una silla y se puso a hablar como si fuéramos grandes conocidos y no como personas que apenas empiezan a conocerse, mientras tomaba el vaso de agua me pregunto de quién eran las zapatillas, vestidos y pelucas que estaban sobre el armario, como me sentí, desde un principio muy agusto con él, le respondí sin ninguna vergüenza que eran mías
- ¿ tienes lenceria?- me pregunto y de inmediato le mostré mi cajón de ropa interior sexy
- Pruebatela, a ver como te ves- me pidio, y yo ni corto ni perezoso,me puse un liguero y medias negras con un picardías del mismo color, y me puse también unos zapatos negros de 12 cm de tacon, me puse mi peluca y sali del vestidor hecha toda una dama sexy,
El se entretenía mientras tanto viendo pornografia en mi pc, se dió la vuelta para verme y levantándose se acercó a mi me tomo de una mano y me hizo dar una vuelta. - Que bien te ves- dijo al momento que me tiraba hacia él y tomándome de la cintura acercó su boca a la mía y nos fundimos en un beso ardiente donde nuestras lenguas se entremezclaban, al mismo tiempo bajo una de sus manos hacia mis muslos y tomó una de ellas y me la apretó, para darme después una palmada.
Baje una de mis manos y tome su erección, sorprendiéndome de lo grande y dura que la tenía. por espacio de unos minutos, estuvimos besándonos y tocándonos nuestros cuerpos. Batallando logre abrir su cierre y sacar su pene de su encierro, lo que vi me maravilló y me excitó mucho, su pene erecto era grande, recto, cabezón y duro, muy duro.
Arrodillada, llegue hasta su pene y lo lleve a mi boca, pasando la lengua por su glande y metiéndome todo lo que cabía en mi boca, para volver a chupar su cabeza, y luego lamer todo el tronco, casi inmediatamente sentí el sabor salado de su leche que escurría discretamente y la cual no desperdiciaba.
Lo llevé a la cama y lo acosté boca arriba y le chupé la polla como quise y el tiempo que quise, hasta que el jugando uno de sus dedos en mi vagina me pidió me diera la vuelta, al hacerlo sentí su lengua en mi ano y como me mojaba con su saliva mis muslos.
Me introdujo el pene despacio, poco a poco, mientras me besaba la nuca, hasta que la tuve toda dentro de mi cuerpo y empezó el vaivén del pene dentro de mí, despacio a momentos y fuerte en otros, me cambio de la posición a cuatro patas y me puso de costado levantando una de mis piernas mientras volvía a penetrarme, metiendomela hasta dentro y sacándola totalmente una y otra vez.
Levanto mi otra pierna quedando ambas sobre sus hombros siguiendo el mete saca, y al mismo tiempo sus manos se posaron en mi busto, dándole duro a la cadera sintiendo sus bolas rebotar en mis nalgas, hasta que de repente me la metio toda y por sus ruidos rudos percibí que estaba eyaculando, para quedar sobre de mi por unos minutos besando mi cuello y acariciándome sin sacarme la polla de dentro de mi.
Cuando al fin se separó de mí, me meti al baño a lavarme, al salir encontré la puerta de la calle entreabierta y ni rastros de mi hombre temiendo lo peor, busqué mi cartera y la encontré intacta, así como todo lo de valor que tenía. Puse el candado a la puerta y me acosté plácidamente, esperando que pronto volviera a mi casa a pedirme agua o lo que fuera.
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